Llegó nervioso. Pasó un fin de semana ansioso. Pero finalmente, junto a Yoko Ono, el 𝐥𝐮𝐧𝐞𝐬 𝟒 𝐝𝐞 𝐚𝐠𝐨𝐬𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝟏𝟗𝟖𝟎 , John Lennon volvió a entrar a un estudio de grabación para comnezar un poducción propia, después de 4 años.
Con mucho entusiasmo, con mucha energía para componer nueva música, la decisión llegó como uan epifanía un mes antes mientras manejaba su velero en medio de una tormenta en el Triángulo de las Bermudas. Aquel deseo se hizo realidad.

En los neoyorkinos estudios de Hit Factorty lo esperaba el productor 𝐉𝐚𝐜𝐤 𝐃𝐨𝐮𝐠𝐥𝐚𝐬 que venía de trabajar con Aerosmith (elegido por la propia Yoko) , y así ambos artistas comenzaron la sesiones del álbum de regreso del exbeatle “𝗗𝗼𝘂𝗯𝗹𝗲 𝗙𝗮𝗻𝘁𝗮𝘀𝘆” , que tenía un mensaje muy claro: era un disco de John y Yoko, de 14 canciones (7 de cada uno y que se presentartía con tracks alternados).

Habían pasado varios días en el departemento del Dakota ensayando con una banda de sesionistas elegida por Douglas, y tras algunos momentos tensos, lograron la sintonía necesaría para ingresar a grabar en armonía.
Yoko especialmente se sentía muy feliz, porque experimentaba la sensación que por piemra vez, desde que trabajaba con Lennon, todo el entorno la respetaba y valoraba su material.
Fueron 40 días de trabajo en 32 sesiones, que tuvieron una particularidad: Yoko ingresaba a las 10 de la mañana para registrar sus composiciones y John recién se sumaba para su parte a partir de las 15:00.
Terminaron grabando 20 canciones, 8 más que fueron quedando para el segundo álbum de esta etapa, que se terminarían en enero de 1981., y que se frustró hasta 1984, por la tragedia del 8 de diciembre en la puerta del Dakota.

En ese interín, cuando comenzaron a grabar, no tenían compañía distribuidora.
Todas se lanzaron para contrarlo con millonarias ofertas, pero por la libertad creativa que pretendía John, terminó firmando contrato el 24 de septiembre, con el joven 𝐃𝐚𝐯𝐢𝐝 𝐆𝐞𝐟𝐟𝐞𝐧 (editaba a Elton John y Donna Summer), quien le pagó 1 millón de dólares para tenerlo en su catalogo, un precio mucho menor a lo que le ofertaron, pero fue el único que contraba a ambos.

Mientras se realizaba la producción en las radios sonaba con mucho éxito 𝐂𝐨𝐦𝐢𝐧𝐠 𝐮𝐩” 𝐝𝐞 𝐏𝐚𝐮𝐥 𝐌𝐜𝐂𝐚𝐫𝐭𝐧𝐞𝐲 con quien ya había recompuesto el vínculo.
Sin embargo, este hit y con ese perfil competitivo entrre ambos, John se volvió a despertar y empujó más sus ganas y su creatividad.
En medio de las grabaciones Paul llamó a los estudios con ganas de hablar con su compañero y auto invitarse para colaborar en el disco, pero la llamada cayó en manos de Yoko, quien la filtró y no le contó nada a su esposo.

Lennon estaba de regreso. El plan era muy concreto: este álbum, un segundo en pocos meses (estaba previsto para la primavera de 1981 EEUU) y luego salir en. 𝐮𝐧𝐚 𝐠𝐫𝐚𝐧 𝐠𝐢𝐫𝐚 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐩𝐫𝐞𝐬𝐞𝐧𝐭𝐚𝐫𝐥𝐨𝐬 a ambos trabajos.

Douglas contó años después como era la idea de ese tour: “𝑱𝒐𝒉𝒏 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒐́ 𝒖𝒏𝒂 𝒈𝒓𝒂𝒏 𝒑𝒓𝒐𝒅𝒖𝒄𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒅𝒆 𝒈𝒊𝒓𝒂 𝒊𝒏𝒄𝒍𝒖𝒚𝒆𝒏𝒅𝒐 𝒏𝒖́𝒎𝒆𝒓𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝑳𝒐𝒔 𝑩𝒆𝒂𝒕𝒍𝒆𝒔 𝒑𝒓𝒆𝒔𝒆𝒏𝒕𝒂𝒅𝒐𝒔 𝒄𝒐𝒏 𝒖𝒏 𝒏𝒖𝒆𝒗𝒐 𝒂𝒓𝒓𝒆𝒈𝒍𝒐” .

Eso nunca sucedió. Sin embargo, nos quedamos con un momento feliz, el de hace 45 años cuando un día, John volvió a ser Lennon.